BAJA TOLERENCIA A LA FRUSTACIÓN
Aunque existan diferencias temperamentales entre los niños, ellos no han nacido con una habilidad para tolerar la incomodidad, ésta se aprende continuamente.
Tal y como los niños van creciendo, ven aumentar las oportunidades de construir su propia tolerancia a la frustración (T.F). Cada vez que encuentren un obstáculo en sus metas, y se les anime a trabajar contra ellas en estas situaciones, está construyendo su Tolerancia a la frustración.
Las habilidades para tolerar la frustración se pueden aprender y con frecuencia se necesita para conseguir metas a largo plazo.